QUINTA

TÉCNICA DE QUINTA.

Apoyar las manos a la anchura de los hombros y a los lados de la cabeza, arqueando la cintura para levantar las piernas, de esta manera  se eleva igualmente la espalda.

Al estar el cuerpo apoyado en la espalda y cuello, se impulsan las piernas hacia arriba, al apoyar las manos se extienden los brazos, elevándose el cuerpo sobre los mismos consiguiendo una forma vertical.

El movimiento se llega a la posición de impulso desde un movimiento de fuerza de  las piernas logrando facilitar el movimiento, partiendo de la posición sentado y dejándose caer de espalda. Es conveniente practicar y aprender dicha subida con un gran impulso ya que esto hará el trabajo del gimnasta más fácil.

ALTERNATIVA  DIDÁCTICA 

Es necesario colocarse lateral al ejecutante, esperar que este lance las piernas de forma vertical y tomarlo por estas para que logre el equilibrio en apoyo invertido.

Otra ayuda es agarrarle las piernas al estudiante durante todo el recorrido para que sepa como las tiene que colocar.